El giallo nace durante la “era dorada” del cine italiano, a principios de los sesenta. El nombre giallo (amarillo en italiano), proviene de una serie novelas publicadas por primera vez en 1929, por la editorial milanesa Mondadori, cuyas portadas eran de color amarillo. En un principio se trataría de traducciones de novelas británicas de misterio e investigación, estilo Sherlock Holmes y algunas novelas americanas basadas en el modelo ejercido por Edgar Allan Poe. Antes de esa fecha, los italianos no tenían una noción mayor acerca de las novelas de misterio. Ya entre los años 30 y 40, la circulación de este tipo de relatos fue en aumento, a pesar de que Mussolini prohibió las publicaciones de novelas detectivescas americanas, debido a que estas podían ejercer cierta influencia en los “italianos de mente débil”, ya que de cierta forma mostraban los crímenes como un acto casi glamoroso.
No fue hasta un buen tiempo después, que los mismos italianos comenzaron a escribir giallos basados en las obras británicas y las americanas, y no fue hasta después de la guerra que comenzaron a escribir novelas con un estilo propio. El giallo como expresión cinematográfica, no se encasilla en un solo género como las novelas, sino que tiende a abarcar distintos género como la novela policíaca, el horror gótico, el drama, entre otros, siendo menos que un género en el sentido convencional, pero que a la vez es más complejo que un subgénero como tal. Por lo tanto yo lo tratare en este post como un género hecho y derecho.
Se reconoce a la película “La muchacha que sabia demasiado” (1963) del director Mario Bava, como el primer giallo, que cuenta la historia de una muchacha que está de vacaciones en Roma y es testigo de un asesinato del cual no existen pistas ni cadáver, por lo que la policía no le cree a la joven.
Entre principios y mediados de los sesenta, el giallo no se presentaba como un género sólido. Este periodo fue utilizado por diversos directores para “practicar” y mejorar las realizaciones con este tipo de temáticas. La película de Dario Argento “El pájaro con las plumas de cristal” (1969), fue la que puso a este género en la palestra, surgiendo una serie de “imitaciones”, con lo que se mantuvo una cierta popularidad de este tipo de films, hasta principios de los 70.
El giallo presenta tramas que giran en torno a una serie de asesinatos, que por lo general son mostrados de manera bastante detallada y gráfica, que son realizados por un asesino enmascarado y con guantes, que por lo general ocupa algún tipo de arma blanca para efectuar los crímenes, jamás utilizan armas de fuego. Estos son seudo requisitos de estos films. La identidad del asesino u asesinos, es por lo general revelada en la parte final del film. Los protagonistas tienden a verse envueltos en estos crímenes y de una forma u otra, terminan siendo arrastrados a la investigación de los mismos. Los policías envueltos en las investigaciones son mostrados como personajes inefectivos, que no tienen que ver mucho con la resolución de los crímenes pero aún así se adjudican el crédito una vez resueltos los casos. Además puedo agregar que el principal motivo de los crímenes, pareciera estar ligado con algún trauma de la infancia.
En cuanto a sus características técnicas, se utiliza mucho el punto de vista del criminal durante la realización de los crímenes, convirtiendo al espectador en cómplice del crimen. Nos convierte en una clase de voyeristas, no en el estricto sentido de la palabra como es definida en el diccionario (persona que obtiene placer sexual cuando observa a alguien desvestirse o teniendo sexo), sino que en el sentido que hace que sintamos el deseo de mirar como ejecuta el crimen a la vez que nos incita a buscar pistas para descubrir la identidad del asesino, a desenmascarar la verdad detrás de sus actos. Además se hace gran uso del zoom, en ocasiones llega a ser excesivo el uso de este recurso. También existe un gran uso de colores vivos, como el verde, el rojo y el azul, recurso bastante utilizado por directores como Argento o Bava.
Estéticamente podemos apreciar que por lo general existe una preocupación por lograr un ambiente adecuado, por lo general opresivo o misterioso, ayudado en gran parte por los colores ya sea de las locaciones, o los entregados por medio de la iluminación. Se hace uso de objetos como muñecas o maniquíes, que simbolizan la despersonalización del asesino, a la vez de demostrar el estado onírico (una constante pesadilla) en la que se encuentran.
Ya más adentrados en los años setenta, el género sufrió un cambio convirtiéndose en relatos policiales más tradicionales. El inicio de los ochenta, marco el retorno del género como se le conocía en un principio de la mano de directores como el antes mencionado Dario Argento y Lucio Fulci. Esto marco un nuevo periodo de popularidad de estos films, que marco una serie de nuevas producciones de una serie de directores, aunque la calidad de estos no iguala a la calidad de las obras realizadas a principios de los setenta.
Muchas de las críticas a este tipo de films recaen en la falta de coherencia de algunos guiones. Un ejemplo de esto podría ser lo que mencione en el post de “Rojo oscuro” (1975), en cuanto al papel ejercido por la periodista, que la verdad esta totalmente demás y parte de las escenas donde aparece no tiene mayor relación con la trama en si. Más allá de esta queja más argumental que cinematográfica, la gran fortaleza de los giallos reside en la estética y además marcaron y marcan una pauta, para una serie de otros films, donde incluso se le ve como el principal precursor de los “Slasher films", tan populares a finales de los setentas y durante los ochenta, en especial en USA y cuyas mayores diferencias con el giallo residen en que por lo general, las victimas suelen ser un grupo de adolescentes con las hormonas revolucionadas, que el asesino es revelado prácticamente desde un principio y no necesariamente tienen por motivo para sus crímenes algún trauma infantil, sino que algunos matan solo por placer o porque sencillamente son malos. Por lo general estas películas tienen una infinidad de secuelas, como la saga de “Halloween” o “Martes 13” (más adelante postiaré con más detalle acerca de este subgénero del horror).
La invitación a descubrir este género, que en lo personal me gusta bastante, esta más que abierta, en especial a examinar la “época dorada” del mismo. Por lo mismo tal y como lo hice en el post del “cine negro” les adjunto una lista de 10 películas que constituyen un buen punto para comenzar a insertarse en el mundo del giallo.
- La Muchacha Que Sabia Demasiado (1963) Dir. M. Bava
- Blood and Black Lace (1964) Dir. Mario Bava
- Pájaro de las Plumas de Cristal (1970) Dir. Dario Argento
- Lizard in a Woman´s Skin (1971) Dir. Lucio Fulci
- La Tarántula del Vientre Negro (1971) Dir. Paolo Cavara
- 7 Orquídeas Manchadas de Rojo (1972) Dir. Umberto Lenzi
- Don´t Torture a Duckling (1972) Dir. Lucio Fulci
- Rojo Oscuro (1975) Dir. Dario Argento
- The Psychic (1977) Dir. Lucio Fulci
- Tenebre (1982) Dir. Dario Argento
por Fantomas.
1 comentario:
Hola, yo también escribí un post sobre el giallo y soy fan confeso de este subgénero. Pasate por mi blog si tienes tiempo. Un saludo
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